RICARDO ESTACIO
Presidente Consejo Estudiantil Programa de Economía,
Universidad de Cartagena


En los últimos 7 años, los estudiantes de educación superior han librado dos batallas a los gobiernos de turno, 2011 y 2018, ambos con resultados favorables para los estudiantes.

La última gran batalla que había librado el sector estudiantil fue en el año 2011, cuando en el gobierno nacional en cabeza de Juan Manuel Santos, se logró hundir la reforma a la Ley 30 que pretendía introducir el ánimo de lucro a las universidades. En ese entonces y luego de meses de ardua movilización, el gobierno nacional no tuvo otra opción que echar para atrás la reforma a dicha ley, y, una vez obtenida la victoria, los estudiantes volvieron a las aulas.

En aquella oportunidad (2011) se denunciaba que el déficit de las universidades era de $11 billones. Actualmente, el déficit creció hasta $18,2 billones, lo cual llevó a las universidades a un estado de inviabilidad financiera por lo que no tuvieron otra opción más que levantar otro gran paro nacional de dimensiones aún mayores que lo sucedido en 2011.

Este gran paro estuvo caracterizado porque se realizaron al rededor de 9 movilizaciones en un periodo de 2 meses, dónde con cada móvilizacion el gobierno cedía un poco con el presupuesto, pero los estudiantes siempre señalaron que a pesar de ser un avance eran aumentos insuficientes que no resolvían el problema estructural de las universidades. Sumado a lo anterior, los estudiantes tuvieron que soportar ver cómo el gobierno nacional,en su astucia, negociaba con quiénes no estaban en paro, cómo los rectores, con el objetivo de crear confusión en la opinión publica y, especialmente, en quiénes sí estaban en paro, los estudiantes.No obstante, los estudiantes se mantuvieron firme y supieron recrudecer la movilización.

Hoy, tras más de dos meses en paro, finalmente estudiantes, profesores y el gobierno llegaron a un acuerdo, dónde basta con ver los números del mismo para dimensionar el gran logro que ha tenido la comunidad educativa, cómo es el hecho de lograr un crecimiento de 17,7% adicionales al crecimiento del IPC, además de $1.05 billones de pesos para Colciencias.

Un hecho a resaltar es que, mientras las antiguas batallas consistían en luchar para lograr frenar la privatización, en esta gran última batalla los estudiantes le ganaron terreno a la misma. Así mismo, con ella los estudiantes envían a los demás sectores de la sociedad el mensaje de que es increíble lo que se puede lograr cuando la sociedad en general se une. ¡Luchar si sirve, luchar si paga!

Los estudiantes ganaron la batalla y ahora se debe empezar la labor de socialización y pedagogía de este gran acuerdo sin olvidar que la lucha por una mejor educación continúa.

Por último cabe anotar que el paro nacional fue decretado por los estudiantes y que este se levanta cuando las asambleas de las distintas universidades así lo dispongan.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.