Por: Ricardo Estacio.
El próximo 26 y 28 de abril se llevará a cabo el proceso de consulta para la designación de los cargos a rector, decanos de facultades y directores de programas en la Universidad de Cartagena. La importancia de esta consulta radica en que se escogerá, entre otros cargos, al nuevo rector de la UdeC, quién es el representante legal y la primera autoridad ejecutiva de la universidad.
Cada votante lleva consigo un nivel de responsabilidad muy grande, por lo que es su deber estar lo más informado posible, para lo cual, la universidad, como ente formador de conocimiento, debería estar comprometida con educar en este aspecto, procurando que los procesos de consultas y/o elecciones se lleven dentro del marco de las garantías democráticas.
No obstante, en este proceso de consultas al interior de la universidad encontramos hechos que llaman la atención de muchos y que pueden parecer muy curiosos. El primer hecho llamativo es que a los candidatos no se les permite el uso publicitario de afiches y/o carteles murales dentro y fuera de la universidad relativo a los aspirantes y sus propuestas. Esta medida limita mucho a los aspirantes en cuanto a querer mostrar sus propuestas y visibilizar su candidatura, por lo que las elecciones se llevan a cabo casi que en la clandestinidad.
Por lo anterior, la realidad dentro del alma mater es que la mayor parte del estudiantado desconoce quiénes son los candidatos que aspiran a ser rector de la UdeC. Además, hay que sumar el hecho de que, dentro de los 6 candidatos a rectoría, hay uno que aspira a reelección, situación que lo coloca en una notable ventaja en cuanto a reconocimiento con respecto al resto de candidatos.
Otro hecho curioso radica en que los cargos no se ejercen necesariamente por quien haya obtenido la mayoría de votos, si no que existe un umbral del 30%, el cual deben alcanzar los candidatos y luego el Consejo Superior de la Universidad designará entre los candidatos que alcancen el 30% quien será el próximo rector. Es decir, que a fin de cuentas quién termina eligiendo no es la comunidad estudiantil, si no el consejo superior.
También cabe resaltar el hecho de que no todos los votos valen por igual, pues en la consulta para el cargo de rector entran a jugar tres elementos: el primero son los profesores, cuyo voto equivale a 1 y su porcentaje es del 50%; los estudiantes, cuyo voto vale 0,1 y su porcentaje es del 40%, y por ultimo están los administrativos, cuyo voto vale 1 con respecto al de un docente y su porcentaje es del 10%.
Sumado a lo anterior, en este proceso de consulta se realizan una serie de foros programáticos, donde los candidatos tienen la posibilidad de exponer sus propuestas y responder las inquietudes que el auditorio les realice, pero también resulta curioso el hecho de que centros tutoriales ubicados en San juan, El Carmen de Bolívar, Monpox, Lorica, no puedan tener foros programáticos en sus sedes, dejando como alternativa a sus estudiantes ver los foros vía Streaming o viajar a un lugar donde si los hagan.
Con este panorama podemos entender por qué los estudiantes poco conocen acerca de los candidatos y sus propuestas. Así mismo, observamos las desventajas entre el candidato que busca la reelección y los demás aspirantes, sumado a que el grueso de la comunidad estudiantil está lejos de un voto bien informado, así que la invitación es a que, a pesar de todo, los estudiantes, docentes y administrativos, investiguemos y estudiemos quiénes son los distintos candidatos y cuales son sus propuestas para poder estar a la altura de la responsabilidad que tenemos en nuestras manos.