El 11 de marzo el presidente Duque apareció en televisión nacional para presentar 6 objeciones a la JEP, avocando su derecho a objetar la ley estatutaria para la “conveniencia de la sociedad”, o bien por Uribismo puro. Eso ya lo verán más adelante.

Antes de empezar a inmiscuirnos en el meollo del asunto es más que importante dejar en claro algo, ya que casi todos los colombianos hemos escuchado hablar de la JEP durante el último año, sin embargo, pocos ciudadanos son los que están realmente informados al respecto, así que para empezar preguntémonos lo más básico.

¿Qué es la JEP?

La JEP es una herramienta jurídica, creada para investigar, esclarecer, juzgar y sancionar las violaciones a los derechos humanos y a los derechos internacionales humanitarios durante el conflicto armado, esta tiene como objetivo conocer la verdad de las atrocidades que fueron hechas por muchos sectores de la sociedad colombiana y juzgarlos por medio de la justicia transicional.” La JEP es el mecanismo de garantía de derecho de las víctimas en Colombia” como bien lo dice Angela María Robledo.

¿Cierto que Suena bacano? Chévere la vaina. Pero entonces… ¿de qué se queja el presidente?, echémosle ojito, punto por punto

  1. No es explicito el deber de los victimarios de reparar a las victimas(art.7).

Esto es Falso, la Corte Constitucional ya se refirió a esto al dejar en claro que las Farc tiene la obligación colectiva de entregar bienes y valores para tener acceso a cualquier beneficio.

  1. No dice que solo el alto comisionado para la paz puede incluir personas en las listas.

La Corte Constitucional señaló que solo en casos excepcionales, en casos de fuerza mayor.

  1. No dice que diligencias/investigaciones puede hacer la Fiscalía con las personas que van a la JEP.

La corte constitucional aclaró que la fiscalía puede continuar investigando y recolectando pruebas hasta 3 meses antes de la resolución de conclusiones.

  1. No es explicito el que se deban agotar todos los esfuerzos antes de decidir no castigar a autores materiales.

En contextos de justicia transicional es indispensable concentrarse en los máximos responsables de los crímenes más graves para evitar generar impunidad de facto, como pasó en la Ley de Justicia y Paz en el proceso de desmovilización de los paramilitares.

  1. No es explícito qué tipo de pruebas puede pedir la JEP para personas en proceso de extradición.

En este punto pasa algo muy curioso, el bacán que tenemos de presidente no quiere acatar la orden de la corte constitucional de suministrar el material probatorio necesario para establecer si los delitos por los que se quiere extraditar al acusado ocurrieron posteriormente al 1 de diciembre de 2016(fecha de la firma del acuerdo de paz). Aquí yo me pregunto algo, Mister presidente ¿Cómo hacemos entonces?

  1. Se debe poder extraditar incluso a quienes están contando la verdad y esto no ha sido aclarado.

Los agentes del Estado y militares que estén contribuyendo a la verdad ante la JEP, no podrán ser extraditados.

¿Qué necesidad tenía el presidente de presentar esas objeciones si todas ya habrían sido resueltas por la corte constitucional?, ¿no le avisaron a Ivancho?

Pero para meterle leña al fuego recordemos que hace menos de un mes Duque dijo que no objetaría esta ley porque “no era legalmente posible hacerlo”, pero y entonces… ¿Qué pasó?, SubPresidente, ¿se le habrá subido el glifosato a la cabeza?, no estoy seguro de que haya sido eso, aunque tendría mucho sentido con su política en pro de este. No obstante, estoy completamente seguro de que el presidente fue influenciado, presionado y jalado de orejas por su jefe después de que este al no poder derogar la JEP decidiese presentar unas reformas (todo esto en sus propias palabras). Demostrando al objetar que es un títere, que no tiene los pantalones y que efectivamente la gente votó por “el que dijo Uribe”, como dijo el filósofo, abogado, politólogo y profesor universitario Gilberto Tobón Sanín “Duque hizo el strip-tease total”, al rendirle pleitesía al doctor Álvaro Uribe Vélez.

¿Y ahora qué?

El presidente Duque ya presentó sus objeciones al congreso, no obstante hay que ver si consiguen  la mitad más uno en el congreso para que estas sean reenviadas a la corte constitucional para que se le haga el respectivo examen(el cual la corte simplemente puede decir que son inconstitucionales y esto sigue como si nada y el presidente tendrá que sancionar la ley), en papel esto no tiene consecuencias pero esto está hecho para atrasar el proceso, generar discusión y alejarnos de dar las discusiones importantes del país, como el saber la verdad, la reparación de las víctimas y pone en riesgo todos los avances hechos hasta hoy día.

Duque, no se esconda

Señor Presidente, no juegue con la paz, una paz en la que por primera vez en la historia ambas partes acuerdan que todo lo que pasó fue tan horroroso y terrible que hay que llevar a los criminales a la justicia, póngase en el papel de la víctima que está esperando a que su proceso se adelante, de las madres que quieren saber toda la verdad de lo que pasó con sus hijos, de los familiares de los desaparecidos, de las personas que están dispuestas a perdonar para seguir adelante, de los excombatientes que están puestos a contar toda la verdad y pedir perdón a las víctimas, señor presidente al parecer usted está aprendiendo mucho de su patrón, si fuese actor se ganaría el premio por papelón que está haciendo al salir a televisión nacional todos los días a decir mentiras, a usar sofismas de distracción(como lo de la protección de los niños, lo cual no entra dentro de las objeciones pero que bien señalan cada vez que hablan de ellas para aludir al sentimiento), presidente Duque, la paz no es un balón con el que usted puede hacer “pinolitas” mientras su copartidarios lo aplauden.

Señor presidente de la república, deje el miedo, aún tiene tiempo para demostrar su fuerza de una forma diferente que enviar al ESMAD, muestre la cara, tome las riendas de su mandato porque si vamos a estar jugando a las escondidas debe de saber que todos los colombianos sabemos dónde está, “1, 2, 3 por Duque que está detrás de Uribe”.

Por: Daniel Herrera

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