Aproximadamente 125 familias de la vereda de Tierra Baja abastecieron sus hogares con alimentos de la despensa agrícola, gracias a las ofertas presentadas por el Mercado Campesino que lidera la Alcaldía de Cartagena a través del Plan de Emergencia Social, Pedro Romero PES-PR.
Fueron más de 4 toneladas de alimentos las que lograron vender los agricultores invitados al “Mercado Campesino: una apuesta de ciudad”, que trasladó productores provenientes de los corregimientos y municipios de Bolívar, quienes les permitieron a los locales, ahorrar entre el 15% y 20 % en sus compras.
“Yo, llegué con 60 mil pesos para mercar y llevo más de lo que esperaba, puedo decir que hoy ahorre y compré comida fresca y saludable. Estos mercados son una gran ayuda para nosotros, no gastamos en transporte y eso también es una ventaja y un ahorro”, afirmó Stefany Vivero, ama de casa de Tierra Baja.
El Plan de Emergencia Social, Pedro Romero, PES-PR, acelera en marcha la estrategia que le apuesta a la seguridad alimentaria de las familias en situación de pobreza extrema, redoblando esfuerzos para seguir garantizando el derecho a la alimentación de estas comunidades.
“Esta iniciativa es posible gracias al trabajo articulado de diferentes entidades, quienes se vinculan a este proyecto con el propósito de mejorar las condiciones de vida de las poblaciones en situación de vulnerabilidad, permitiendo que estas personas accedan a alimentos de la canasta familiar con alto valor nutricional”, declaró Cielo Blanco Flórez, directora del PES-PR.
La funcionaria también destacó que Mercados Campesinos es una estrategia que, no solo permite que las personas de escasos recursos puedan comprar a bajo costo, sino también a la reactivación económica de los campesinos, quienes venden sus cosechas sin necesidad de intermediarios.
Con el respaldo de aliados del campo, Consejo Comunitario de Tierra Baja y ‘Carnes Frías mi Res’, este proyecto pretende seguir impactando en la economía de las familias vulnerables, de compradores y vendedores; mientras unos se alimentan bien a precios bajos, otros mejoran gradualmente su economía a través del comercio.
“Vender nuestros alimentos sin necesidad de intermediarios es una ventaja para nosotros como campesinos y para los compradores. Hoy, me voy contenta, vendimos más de lo que esperábamos. Nosotros, cosechamos arroz natural sin ningún químico, lo que garantiza una mejor nutrición a las familias que acceden a este producto”, señaló Íngrid Buelvas, agricultora de la vereda de Leticia del corregimiento de Pasacallos.