En 1982, el Centro Comercial El Pueblito vio nacer uno de los lugares más emblemáticos de la vida social en Cartagena: La Rotonda. Este espacio, sin paredes que limitaran el ambiente, fue un punto de encuentro que definió una época. La Rotonda no solo ofrecía comida rápida, sino que también regalaba experiencias, convirtiéndose en un ícono de los años 80.
Bajo la dirección de Nando Daníes y con el toque gastronómico de “El Santa”, las hamburguesas y perros calientes se convirtieron en un referente local. Acompañadas de cerveza bien fría, cada visita era una oportunidad para disfrutar con amigos en un ambiente abierto, donde la libertad de esos tiempos parecía contagiarse con cada plato.
Los cartageneros que vivieron esos años aún recuerdan con cariño las noches en La Rotonda, donde las risas, las charlas y la buena comida eran los protagonistas. Aquellos que disfrutaron de sus sabores y su ambiente coinciden en que La Rotonda no era solo un lugar, era el símbolo de una generación que encontró en él su propio espacio para crear recuerdos imborrables.