En aras de facilitar el acceso al pasaporte en Colombia, desde el 3 de octubre implementarán cambios significativos en la emisión de los mismos, con ajustes tanto en los costos como en la accesibilidad, por ello ciudadanos que se encuentren en los niveles 1 y 2 del Sisbén podrán obtenerlo sin costo alguno. En ese sentido el ministro de Relaciones Interiores, Luis Gilberto Murillo, anunció que el precio de pasaporte ordinario se reducirá en un 12%, pasando de $207.000 a 180.000, del mismo modo, el pasaporte por frontera ahora costará $100.000, en lugar de 125.000. Por otro lado, las reducciones también se aplicarán para los colombianos en el extranjero con precios de $82 en Estados Unidos y $60 en Europa. Por su parte, la cancillería lanzó un nuevo sistema de agendamiento de citas con tecnología de punta para acelerar el proceso, mismo que estará integrado con el Archivo Nacional de Identificación (ANI) de la Registraduría Nacional, lo que permitirá un registro más rápido de los solicitantes. Este beneficio gratuito, también se extenderá a personas mayores de 62 años, discapacitados y quienes necesiten viajar por motivos de salud, educación, empleo o participación en eventos deportivos. Para obtener este beneficio, los solicitantes deberán presentar documentos que acrediten su situación como:

Los pastores cartageneros, Miguel y María Paula Arrazola fueron invitados a participar en la posesión del nuevo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, por su gran respeto y admiración a la nación norteamericana, además de su afinidad con el nuevo gobierno conocido como «La Era Dorada». Los fundadores de la conocida Iglesia en Cartagena, como Ríos de Vida, son personas influyentes quienes se han caracterizado por la promoción de valores conversadores y el refuerzo de creencias en torno a la familia. Los líderes religiosos también han liderado debates de carácter social y políticos en contra del actual gobierno colombiano.  La posesión, que, se llevó a cabo desde el Capitolio de los Estados Unidos, marca un inicio de nuevas políticas conversadoras desde diferentes frentes, lo que despierta, sin duda, a la comunidad religiosa de América Latina.