El Parque de Bolívar, también conocido como Plaza de Bolívar, se sitúa en el corazón del centro histórico de Cartagena de Indias, capital del Departamento de Bolívar, Colombia. Este parque es un espacio emblemático que refleja la rica historia y cultura de la ciudad. Originalmente llamado Plaza de la Iglesia y luego Plaza Mayor, ha sido escenario de importantes eventos desde la época colonial. En 1610, tras la instalación del Santo Tribunal de la Inquisición, adoptó el nombre de Plaza de la Inquisición. En 1896, se erigió la estatua ecuestre de Simón Bolívar, obra del escultor venezolano Eloy Palacios, lo que llevó a que el lugar se conociera como Plaza de Bolívar.
El entorno urbano del parque es representativo de la ciudad amurallada, caracterizada por sus calles estrechas, manzanas irregulares y edificaciones coloniales que no superan los cuatro pisos de altura. Este núcleo histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, convirtiéndose en un atractivo turístico clave.
El parque presenta amplias zonas verdes y pavimentadas, con una variada arborización y mobiliario urbano que incluye bancas y fuentes de agua. Las calles que lo rodean tienen un uso mixto, integrando vivienda, comercio y servicios. Además, el Parque de Bolívar es un ícono en los recuerdos de muchos niños cartageneros, quienes solían venir a alimentar las palomas alrededor de la estatua de Simón Bolívar.
Alrededor del Parque de Bolívar se encuentran varias edificaciones significativas, como el Palacio de la Inquisición, de estilo barroco; la Catedral de Cartagena, que refleja el estilo herreriano; y el Palacio de la Proclamación, antiguo ayuntamiento y sede de la gobernación hasta 2016. También destacan el Banco de la República y el Museo del Oro, que enriquecen aún más la oferta cultural y patrimonial del área.