En Cartagena, mas específicamente en los años 70, cuando el desarrollo urbano aún convivía con tradiciones y costumbres locales, los buses de la desaparecida ruta de Torices marcaron una época inolvidable en el transporte público. Estos vehículos, fabricados en los años 60, eran Chevrolet modelo 1963, y representaban una de las formas más comunes y económicas de moverse por la ciudad, con su diseño peculiar, estos buses carecían de ventanas de vidrio, y en su lugar, llevaban cortinas de lona gruesa, similares a las de los camiones, que se sujetaban con presillas de cuero. Estas cortinas podían subirse o bajarse según la necesidad, ofreciendo protección contra el sol abrasador o las lluvias ocasionales, sin embargo, el viento a menudo las levantaba, y con él, pequeños rocíos de agua o polvo impactaban en los pasajeros, dando origen al apodo «buses pringa cara». A pesar de sus limitaciones, como frenos de líquido y un motor que funcionaba exclusivamente con gasolina, estos vehículos fueron un símbolo de accesibilidad, ya que el costo del pasaje era menor en comparación con los modernos buses que comenzaron a aparecer con ventanillas de vidrio, por ello, los «buses pringa cara» se convirtieron en una opción popular entre los habitantes de Torices y otras zonas de Cartagena.

Hoy, 29 de octubre, liderado por la Sociedad de Mejoras Públicas de Cartagena, en compañía del Museo Histórico de Cartagena y en alianza con la Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano (Utadeo), se llevará a cabo el Concurso de Historia de Cartagena. Este evento contará con la participación de estudiantes de distintas instituciones educativas, quienes pondrán a prueba sus conocimientos sobre la historia de la ciudad. Este año, los estudiantes participantes se sumergen en la historia de Cartagena bajo la premisa de explorar temas como sus calles, iglesias, conventos, salud y religión. Todos estos conceptos fueron interiorizados mediante una ruta que recorrió cada uno de los lugares destacados en este concurso. “Los niños y jóvenes de los colegios e instituciones educativas participantes recorrieron estos lugares con el apoyo y la guía de un grupo de estudiantes de Historia, y exploraron en profundidad la temática de este año a través de talleres y actividades pedagógicas, lo cual les ofrece una visión 360 de la historia y la oportunidad de apropiarse desde su propia percepción de lo aprendido, no solo para el concurso, aún más importante: para la vida”, señala María Pia Mogollón, Directora Ejecutiva de la Sociedad de Mejoras Públicas de Cartagena. Así, la Ruta de Historia de Cartagena ha servido para rescatar los saberes culturales, promover el sentido de pertenencia en cada uno de los estudiantes y fomentar una generación de cartageneros más empoderada de su cultura desde un conocimiento tanto teórico como vivencial. Estas actividades potencian la conciencia crítica y un profundo respeto por las raíces de Cartagena.

El Parque Lineal de Crespo fue testigo de la energía y entusiasmo durante la mañana de este domingo con el Unisinú Running 5K 2024, un evento deportivo que reunió a más de 750 personas en una jornada inolvidable. Desde las 5:20 de la mañana, familias, estudiantes, docentes y deportistas recorrieron con determinación cada kilómetro, destacando la promoción de hábitos saludables enfoque en la recreación, la salud y un moderado toque competitivo. La actividad no solo logró su objetivo de incentivar el bienestar, sino que también se convirtió en una celebración para quienes disfrutan del deporte. «El Unisinú Running 5K no es solo una carrera, es una experiencia que nos motiva a seguir creciendo y avanzando juntos», expresó uno de los organizadores con orgullo. Gracias a una organización impecable y a la masiva participación, el evento dejo una gran huella en su trayectoria, consolidándose como una cita imperdible en el calendario deportivo de la ciudad.