La reconocida y admirada historiadora colombiana, Diana Uribe nos vuelve a cautivar hablando un poco sobre su nuevo libro ‘brújula para el mundo contemporáneo’, mientras hace un análisis geopolítico del presente junto al periodista William Márquez.
Diana Uribe es un nombre que se lleva escuchando en el Hay Festival desde hace tiempo, sus conferencias siempre completan aforo y tienen gran éxito. ¿Por qué? la respuesta es simple dijo William Márquez: «es que Diana cuenta la historia como si fuera un chisme».
La historiadora, amada por los colombianos y el público internacional, llega a la conferencia del Hay Festival Cartagena 2019 bajo una ola de aplausos, se sienta pero luego se pone de pie y da una vuelta invitando al público a admirar su vestido: es un vestido azul con un mapa geopolítico mundial, ella orgullosa de su atuendo no lleva la historia solo con su palabra: ahora también se viste con ella.
El chisme histórico
Diana empieza a cuestionar el mundo, lo primero que señala es el nombre ‘Medio Oriente’, «¿en medio de qué? ¿cuál era el centro entonces si se supone que la tierra es redonda?», la explicación de Uribe es simple: el centro del mundo siempre fue Europa, y el mundo está centrificado de acuerdo a quién le preguntes, porque para los Incas, Cuzco era el centro de la tierra.
Pero para el mundo contemporáneo, el centro sigue siendo Europa y es ahí que viene el chismecito: «seguimos mirando el mundo con los ojos del siglo XX», apunta Diana. Ese es el motivo por el cual Europa sigue siendo el centro y por el cuál tenemos los mismo problemas políticos, porque aún existe la misma mentalidad a pesar de que estamos en un siglo diferente, es como si nos negáramos a aceptarlo.
La brújula
En un mundo con Derechos humanos y una enorme ola migratoria, los problemas ya no son la Guerra Fría, sino la negación de la validez de una cultura y la deshumanización de las civilizaciones. La verdadera crisis es que a pesar de los avances, nos seguimos manteniendo con una mentalidad violenta.
«Hay que dejar a un lado el síndrome del enemigo para justificar todo el daño que se haga», apunta Diana.
Ese síndrome es el que sataniza una cultura. Pone de ejemplo a los musulmanes y la relación casi inmediata que hacemos de ellos con el terrorismo y cómo se justifica de esa manera los ataques que se hagan hacia ellos.
Diana apunta a que no hay que dejar de creer en la esperanza de la superación de cada crisis política.
Su nuevo libro ‘brújula para el mundo contemporáneo‘ apunta a eso, a mirar el mundo desde otra perspectiva. En él se explica lo que ocurre en el siglo XXI. Los interrogantes que van desde el ámbito político y económico, hasta el cambio climático y de mentalidad, en un siglo donde el desierto del Sahara se está extendiendo y seguimos preguntándonos por qué ocurren las guerras por las misma razones que hace 100 años.