Desde hace mucho tiempo, se ha tenido cierto recelo al hablar sobre la donación de órganos a causa de diferentes mitos – literarios y cinematográficos – que, incluso en la actualidad, se han tomado como ciertos, y ahora además suelen difundirse también por cadenas en los servicios de mensajería instantánea. Lamentablemente esta desinformación afecta la donación de órganos, lo que reduce la esperanza de vida a los pacientes que necesitan un trasplante.
La doctora Carolina Guarín, jefe de cuidado crítico y trasplante renal de la Clínica del Country y Clínica La Colina, afirma que: “el trasplante de órganos y algunos tejidos como sangre y médula ósea, es, en muchas ocasiones la única alternativa de tratamiento que tienen muchos de los pacientes con enfermedades crónicas terminales, un tratamiento que solo puede darse cuando existe el donante que aporte el componente. Hasta el momento, no existe ningún dispositivo que pueda reemplazar de forma adecuada la función de un órgano o tejido de los mencionados”.
Según el último reporte estadístico del Instituto Nacional de Salud, al 31 de diciembre de 2021, en Colombia hay 2.839 pacientes esperando un riñón, 163 un hígado, 49 un corazón y 48 de hígado según las cifras de la Red Nacional de Donación y Trasplante de órganos y Tejido. Ante este panorama, la Clínica del Country y Clínica La Colina invitan a tomar la decisión consiente y voluntaria de ayudar a miles de pacientes por medio de las donaciones de sangre y órganos, dejando atrás toda desinformación:
Mito #1: si hay dinero, el trasplante de órganos se puede adelantar. Falso. La lista de espera es un banco de datos en donde la asignación de los órganos obedece a criterios clínicos y de compatibilidad, es decir, que el receptor debe ser compatible con el donante para disminuir la posibilidad de rechazo, por lo cual aquí el dinero, el estrato social o el poder político son irrelevantes. Los trasplantes de órganos son procedimientos que están cubiertos por el sistema de salud (POS), lo cual hace que el receptor no deba pagar por ellos.
Mito #2: cualquier persona es compatible para ser donante. Falso. La compatibilidad entre el donante y quien recibe la donación debe ser verificada, por ello, se realiza una hospitalización por tres días donde se realizan todo tipo de exámenes; hasta psicológicos para comprobar que se esté preparado para el procedimiento. Siempre se hace una búsqueda activa de posibles donantes dentro del grupo familiar, donde existe una posibilidad que sean completamente incompatibles.
Mito #3: si me registro como donante y tengo una emergencia médica, no me atenderán con el fin de extraer mis órganos. Falso. En el momento de una emergencia, el servicio de salud siempre prestará la atención que el paciente requiera buscando salvar su vida. Solamente al ser declarado fallecido, ya sea en muerte encefálica o en parada cardíaca, el personal de salud encargado del tema de donación iniciará los procedimientos correspondientes para garantizarle al fallecido su derecho a donar.
Mito #4: si dono todo, mi familia no va a tener cuerpo para enterrar. Falso. Los procedimientos en donde se realiza extracción de componentes anatómicos no solo cumplen con criterios quirúrgicos y clínicos, sino que se desarrollan en un marco de respeto y dignidad para con el cuerpo, conservando la estética de forma tal que se puedan llevar a cabo los rituales funerarios que la familia desee.
Mito #5: la edad es un impedimento para donar. Falso. Al momento de fallecer se evaluará qué componentes son aptos para trasplante de acuerdo a la condición clínica y a la edad. En el caso de los menores de edad no pueden, legalmente, tomar la decisión propia de ser donantes, pero sus padres o tutores pueden autorizar, al momento del fallecimiento del menor, que éste salve la vida de otros niños en lista de espera.
Mito #6: Colombia es un país que trafica con órganos. Falso. De acuerdo con el Instituto de Medicina legal no existe ningún registro en Colombia de tráfico de órganos. Todos los procesos de donación y trasplante son coordinados, vigilados y auditados por el Instituto Nacional de Salud y las Secretarías de Salud, son procedimientos médico-quirúrgicos de alta complejidad que requieren una infraestructura avanzada y un personal altamente entrenado.
Donación de sangre, acto voluntario con beneficios para el donante
La donación de sangre puede considerarse un acto preventivo porque no solo genera un beneficio para quien la recibe, sino también para quien dona, puesto que esta sangre es sometida a diferentes estudios para descartar cualquier infección o enfermedad, declarando así el buen estado de salud del donante. Cuando una persona dona sangre puede ayudar hasta a 3 personas, y su cuerpo volverá a producir la sangre donada en un periodo de 60 días, haciendo posible la donación cada 2 meses.
Algunos de los beneficios al donar son la mejora en el flujo sanguíneo, la reducción en el riesgo de sufrir un infarto y accidentes cardiovasculares estimula la producción de nuevas células sanguíneas, equilibra los niveles de hierro en la sangre, entre otros. Esta, no genera ninguna contraindicación para el donante y representa la oportunidad de mejorar y hasta salvar la vida de quienes la reciben, ya que normalmente esta sangre va dispuesta a pacientes que se encuentran en estado crítico y su cuerpo no puede producir sangre nueva.