El pasado 27 de agosto se adjudicó −después de varios días en que si, en que no, en que quizá− mediante rueda de negocios, el contrato del programa de alimentación escolar (PAE) de la ciudad. Adjudicación llevada a cabo mediante un convenio interadministrativo efectuado por la Alcaldía de Cartagena junto con la bolsa mercantil colombiana, del Mercado de Compras Públicas (MCP) en dónde Correagro S.A. fungió como la firma comisionista que eligió al operador encargado de suministrar la alimentación escolar oportuna a muchos niños de la ciudad.

Esta labor quedó en manos de la Unión Temporal PAE Cartagena 2018, quien tendrá que suministrar de la mano de $18.491.595.952 pesos (Costo del contrato), 90.925 porciones de comida día a día. Representadas en 3.779 raciones para la jornada única de establecimientos oficiales de la ciudad y 10.920 almuerzos de jornada única. Hasta aquí todo parece estar claro. Y la alcaldía de la ciudad parece estar tranquila con dicha iniciativa en aras de la trasparencia y de la calidad buscadas en la bolsa mercantil, entidad en donde el Distrito ve seguridad para el tema de alimentación escolar que en la ciudad, desde siempre, ha sido un desastre total.

No es de olvidar el más reciente ejemplo de incongruencias dentro de la contratación en alimentos escolares como lo fue la compra de pechugas de pollo en $40,000 cada una y la compra de 2.800 kilos de canela en 39 millones de pesos, además de la compra de 2,6 millones de panes a $400 pesos cada uno y en donde nunca se supo a dónde fueron a aparar 1 millón de ellos. Todo esto adjudicado por contratación directa por el hoy ex alcalde investigado: Manuel Vicente Duque. Y Podemos seguir indagando y encontraremos muchos casos más.

Pero sobre todo notaremos que en estos casos siempre hay una constante: La contratación directa. Elemento que representa uno de los mayores factores de este despelote alimenticio. Sólo en 2017 el 79% de la contratación del PAE se efectuó mediante esta modalidad de contratación, mientras que la licitación pública solo obtuvo el 2%. Y muchas de estas contrataciones directas curiosamente son obtenidas por las mismas firmas operadoras de siempre. Curiosamente.

Recientemente, durante el mes de julio la Superintendencia de Industria y Comercio señaló a varios empresarios como miembros de un cartel que acomodaba licitaciones por 1,5 billones de pesos. Dentro de esa investigación llevada a cabo en la capital del país, se judicializó a un implicado y los demás siguen investigados. Algunas firmas que figuran dentro de este proceso son por ejemplo Alimentos S.A.S., investigada además por el caso del cartel de las frutas, o por ejemplo Le & Ve Alimentos Macsol S.A.S dirigida por Marisol Vela Gómez, y así, varios otros operadores más.

Actualmente la Unión Temporal PAE Cartagena 2018 (UT PAE), encargada de llevar la alimentación que necesitan muchos niños de la heroica para que la falta de alimento no sea una excusa para la deserción estudiantil, quedó integrada después de una rueda de negocios en la capital del país, por la Fundación para el Desarrollo Social Integral: (Funprodesi) y por la sociedad Le & Ve alimentos Macsol S.A.S. Así pues, esta es la nueva fuerza alimenticia escolar de la ciudad. Habrá entonces como la alcaldía, que confiar en la buena fe y la transparencia y calidad de dicha adjudicación y esperar que de verdad se empiece a cambiar la alimentación escolar de la ciudad de la mano de estos operadores transparentes. Saquen ustedes sus conclusiones. Amanecerá y veremos.

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