En el corazón de Getsemaní, uno de los barrios más emblemáticos de Cartagena, se encuentra un rincón que ha resistido la prueba del tiempo, y que a pesar de ser testigo de innumerables historias, sigue manteniendo el sabor y la esencia del barrio. Se trata de la tienda más antigua de Cartagena conocida como ‘Las Tablitas’, su nombre es relativamente reciente, pero su historia está entrelazada con la memoria colectiva del vecindario y refleja la transformación de una comunidad que ha sabido adaptarse sin perder su identidad.
Las Tablitas, que en sus primeros días fue conocida como ‘La Bolsa y El Bonguito’, tiene un origen que sigue siendo un misterio, ya que no se sabe a ciencia cierta quién fue su primer dueño ni desde que año funciona, aúnque se cree que se fundó hacia mediados de los años 1600, una época en la que ya se hablaba de las casas de tablitas en Getsemaní, una modalidad arquitectónica popular en la Cartagena colonial.
El nombre de Las Tablitas, sin embargo, no llegó hasta 2011, cuando su actual dueño adquirió la tienda y decidió rendir homenaje a la estructura arquitectónica que definía la fachada del local. En este histórico lugar, todavía venden arroz, azúcar y aceite menudeado y cada tarde cobra vida con los carretilleros que se toman un descanso en la acera y los vecinos que juegan dominó a su alrededor.
Las Tablitas, es de esos lugares que han sido testigo de cambios tanto en el barrio como en la ciudad misma sin perder su esencia original, es un rincón donde el pasado y el presente se encuentran y que se mantiene firme como un pedazo de historia viva en Getsemaní.