Durante el consejo de ministros transmitido en vivo este lunes, el presidente Gustavo Petro sorprendió al país con una contundente reflexión sobre la corrupción en Colombia. El mandatario admitió que esta problemática está arraigada en todo el aparato estatal, sin distinción de ideología política o nivel administrativo.
“He perdido la inocencia”, confesó Petro, tras señalar que la corrupción no es exclusiva de un sector político. “Eso de que la derecha roba y la izquierda no, es pura carreta”, afirmó, dejando claro que el problema trasciende etiquetas partidistas.
Según el presidente, la corrupción afecta directamente a obras clave como acueductos, carreteras y colegios, proyectos fundamentales para mejorar la calidad de vida de la población. Petro fue enfático al decir que el desvío de recursos no se limita a las administraciones municipales: “La plata se pierde en los municipios no porque el problema sea local, sino porque está en todas partes”.
Durante su intervención, el jefe de Estado criticó la forma en que algunos sectores ven al Estado como una oportunidad para enriquecerse. “Ven al Estado como una vaca de ordeño, como la última oportunidad para llenarse los bolsillos”, expresó con preocupación.
Frente a este panorama, hizo un llamado urgente a su gabinete para fortalecer los mecanismos de control sobre los recursos girados a las regiones. Señaló que actualmente no existe un seguimiento eficaz y que se necesita una vigilancia más rigurosa para garantizar que el dinero público se traduzca en verdaderas soluciones para la ciudadanía.











