Un estudio del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), publicado en PNAS, identificó fósiles químicos en rocas de más de 540 millones de años, lo que apunta a que las demosponjas —esponjas marinas modernas— podrían ser los ancestros más antiguos del reino animal.
¿Qué son los fósiles químicos?
Los fósiles químicos son restos de biomoléculas de organismos que quedaron atrapados en sedimentos durante millones de años. En este caso, se identificaron esteranos, compuestos derivados de esteroles como el colesterol, presentes en las membranas celulares de organismos complejos.
Las demosponjas: posibles primeros animales
Los investigadores rastrearon estos esteranos hasta las demosponjas modernas, animales multicelulares, blandos y filtradores que habitan en los océanos. Según el científico Roger Summons, estas esponjas primitivas probablemente carecían de esqueleto de sílice y vivían en ambientes marinos.
Evidencias que respaldan el hallazgo
Este nuevo estudio amplía los hallazgos de 2009, cuando ya se habían detectado señales químicas de esponjas en rocas antiguas. En esta ocasión, el equipo analizó rocas del período Ediacárico en Siberia, Omán e India, encontrando esteranos de tipo C30 y C31 que descartan un origen geológico y refuerzan su procedencia biológica.
“Tenemos tres líneas de evidencia que se complementan y concuerdan, apuntando a que estas esponjas se encuentran entre los primeros animales que aparecieron en la Tierra”, aseguró Summons.
Próximos pasos en la investigación
El equipo del MIT planea ampliar la búsqueda de estos fósiles químicos en rocas de otras regiones para precisar con mayor exactitud cuándo surgieron los primeros animales en la historia de la Tierra.
Conclusión
El hallazgo ofrece una de las pruebas más sólidas hasta la fecha de que las demosponjas fueron de los primeros animales en evolucionar, mucho antes que otros grupos, lo que reconfigura nuestra comprensión sobre los orígenes de la vida animal en el planeta.











