El Cuartel del Regimiento Fijo en Cartagena de Indias fue una obra clave en la historia militar de la ciudad, construido a finales del siglo XVIII para alojar a las tropas del Regimiento Fijo y que, antes de su construcción, los soldados sufrían grandes incomodidades, durmiendo en esteras al aire libre y expuestos a las enfermedades.
Pero fue hasta 1790, cuando el coronel Anastasio Zejudo propuso su construcción debido a las malas condiciones de los soldados, especialmente el primer batallón, que ni siquiera podía abrir sus catres. El proyecto fue aprobado por el virrey José de Espeleta en 1791 y financiado en parte por los ahorros generados tras el retiro de oficiales.
Siendo así, la obra se completó en 18 meses y fue considerada una de las mejores de la ciudad. El edificio, que costó alrededor de 30,697 pesos, tenía capacidad para 615 camas y fue ocupado por la tropa el 4 de noviembre de 1794.
Sin duda, el Cuartel del Regimiento Fijo no solo fue un refugio para los soldados, sino que también desempeñó un papel crucial durante eventos históricos como la sublevación comunera de 1781, donde sus tropas defendieron el orden colonial en el Nuevo Reino de Granada.
En la actualidad, el antiguo cuartel es sede de los Despachos Judiciales de Cartagena, pero su historia sigue siendo un testimonio de la importancia militar de la ciudad en tiempos coloniales.
Fuentes: MUSHCA
Crédito Img: MUSCHA / Imágenes antiguas Cartagena