Este miércoles 18 de julio, la Fundación Grupo Conservar comienza el desmonte de las piezas que integran el sistema del Reloj Público, para su mantenimiento y restauración.
Esta firma especializada en conservación y puesta en valor del patrimonio mueble de la ciudad será la encargada de hacer que el reloj de la Torre vuelva a dar la hora.
El tiempo presupuestado para el inventario, mantenimiento y conservación de cada una de las partes que integran esta emblemática máquina del tiempo es de dos meses contados a partir de la fecha. Por lo que, el mes de septiembre debe haberse completado dicha tarea.
También se intervendrán las campanas y todo el engranaje, que por las condiciones de nuestro ambiente y las brisas marinas han afectado el sistema del reloj.
La directora de la Oficina de Apoyo Logístico del Distrito, Jaqueline Ortega, explicó que las partes serán llevadas al taller de la Fundación Conservar, para que expertos en conservación de este tipo de monumentos puedan realizar los trabajos de mantenimiento.
“Desde la Oficina de Apoyo Logístico, la Escuela Taller y el Instituto de Patrimonio y Cultura, IPCC, se hará acompañamiento permanente, teniendo en cuenta que el Reloj debe conservar su valor patrimonial”, dijo la funcionaria.
El tiempo se detuvo en Cartagena
El 12 del mes de febrero, el emblemático Reloj Público dejó de marcar la hora y desde entonces se han mantenido las manecillas ancladas.
La entonces Directora de la Oficina de Apoyo Logístico, Judith Pérez, pedía un poco de paciencia a la ciudad porque el trabajo que quería entregar era muy valioso. La entrega estaba dispuesta para el mes de marzo.
Cuatro meses después de lo planificado, el Reloj Público sigue sin funcionar y por la segunda vez, en este año, la administración anuncia mantenimiento para el monumento.
Iniciada la ejecución de los trabajos, los cartageneros esperan volver a confiar el rumbo de sus actividades diarias a las campanas y las manecillas del Reloj Público.