La Contraloría General de la República ha alertado sobre el alto riesgo de terminación anticipada del contrato de concesión de Autopistas del Caribe, que abarca el Corredor de Carga Barranquilla-Cartagena. El contrato, valorado en $6,75 billones, debería haber entrado en fase de construcción en abril de 2023, pero hasta la fecha no se han iniciado las obras.
La Contraloría señala que el incumplimiento de plazos se debe a problemas con dos de las siete estaciones de peaje previstas: Turbaco (existente) y Arroyo de Piedra (nueva). Las dificultades en el funcionamiento de estas estaciones, así como la oposición de las comunidades locales a las tarifas propuestas, han llevado al Gobierno Nacional a suspender temporalmente el cobro de peaje en Turbaco para ciertos vehículos y a posponer la construcción de la nueva caseta en Arroyo de Piedra.
El Contralor Carlos Hernán Rodríguez Becerra ha instado al Ministerio de Transporte y a la ANI a trabajar de manera conjunta con el concesionario y las comunidades para resolver esta situación de manera urgente y efectiva.