Giuseppe Tomasi di Lampedusa (1896-1957) nos dejó una paradoja que bien puede funcionar como idea principal a la hora de buscar la evolución de productos que ya cuentan con un éxito considerable: «Para que todo siga igual, es necesario que todo cambie». Algunas empresas optan por esperar a que se consoliden determinas tendencias del mercado, mientras que otras optan por tratar de anticiparse a la evolución de este y convertirse en un motor de cambio. Y siempre están esos gigantes que optan por la expansión antes que por la renovación.
A continuación, vamos a comentar tres ejemplos de productos (en un sentido amplio) de éxito que han logrado encajar con las necesidades y formas de consumo de un mercado en constante cambio.
Magic: The Gathering™ Online
Magic: The Gathering (o Magic: El encuentro) puede considerarse el juego de cartas coleccionables más popular del mundo. Ideado en 1993 por el profesor de matemáticas Richard Garfield, salió al mercado de la mano de Wizards of the Coast. Su éxito se deriva del diseño de sus mecánicas, atractivas y complejas, y de su condición “coleccionable”, con cartas raras (algunas extremadamente útiles durante el juego) que alcanzan precios astronómicos.
En el caso de Magic: The Gathering, hubo reticencias a la hora de dar el salto a un modo online muy demandado por el público, quizá porque se veía como un producto diferente que podría perjudicar las ventas de sus cartas y mazos físicos. Así, dejaron espacio para juegos como Hearthstone, del gigante Blizzard Entertainment. Finalmente, Magic se ha decidido dar el salto al formato digital y los conjuros, tierras, artefactos y criaturas de su universo trasladan sus diseños al píxel.
Aunque todavía le queda mucho trabajo por hacer, el hecho de contar con una comunidad de jugadores fiel y el aura de clásico que le rodea auguran un buen futuro a esta adaptación. Si además consiguen coordinar y regular la compra-venta de cartas digitales, pueden abrir un nuevo mercado a partir de un modelo de negocio que ya conocen.
Grand Tour de PokerStars
Los orígenes del poker están envueltos en un halo de misterio que encaja a la perfección con la naturaleza del juego que popularizó el concepto de “farol”. Se sabe que hay descripciones de partidas en Nueva Orleans en 1829, pero empleando una baraja con solo veinte cartas. No mucho más tarde, aparecen referencias al uso de la baraja francesa de 52 cartas y a la aparición de manos en las que el palo (corazones, diamantes, picas o tréboles) era el factor determinante, como el color.
Es uno de los juegos clásicos más populares en Estados Unidos, y el formato de torneo, con eventos como las Series Mundiales, ha extendido su popularidad por todo el mundo. Con el paso al formato online, además, se han creado comunidades de jugadores que han llevado el desarrollo matemático del juego a nuevos niveles.
El Texas Hold’em es, sin duda, la variante más popular, y la competencia entre salas de poker virtuales por hacerse con la mayor parte del mercado es feroz. Aquí juega un papel crucial la innovación constante en los formatos y la búsqueda del siguiente gran éxito, analizando las tendencias para anticiparse a los gustos del jugador. Con el formato de Grand Tour, PokerStars busca ahora dinamizar las mecánicas de sus torneos ‘knockout’ introduciendo un sistema por fases que se asocia con un tour ciclista.
La idea de competir contra miles de jugadores para avanzar en un formato por etapas, eliminando rivales para hacerse con su recompensa, ha sido muy bien recibida por un público deseoso de partidas trepidantes, al que parece haberle gustado la introducción de un componente aleatorio en forma de multiplicadores sobre las recompensas obtenidas.
ComiXology y los comics online
El papel cada vez cede más terreno en favor de las pantallas digitales. Para las nuevas generaciones resulta natural usar sus smartphones o tablets para leer libros o noticias, y los comics no son ajenos a esta tendencia. Además, se trata precisamente de su público potencial. Así surge la idea de la distribución online, y ComiXology se ha convertido en el referente absoluto. Ahora propiedad de Amazon, distribuye títulos de editoriales como DC, Image o Dark Horse, pero también deja espacio para la publicación de títulos “indies”.
Gigantes como Marvel, propiedad a su vez del gigante Disney, ha renunciado al desarrollo de su propia plataforma y ha preferido optar a integrarse mejor dentro de ComiXology. La plataforma sigue centrada en las ediciones de Estados Unidos -aunque poco a poco se va ampliando a otros idiomas-, pero sus ofertas y lotes a precios reducidos resultan extremadamente atractivos.
