Por Rogelio Tirado
Uno de mis temas preferido es sobre la política, considero que el escenario de la política es la discusión de las ideas, el espacio de las ciencias humanas, donde alardeó que soy filósofo. En las ciencias humanas de la Universidad de Cartagena en esa academia piensan que los filósofos no existen en el momento pues los asumen por lo general como personas del pasado, muertas o muy lejanos; esto trae consigo indiferencia a las propuestas de los candidatos.
En la política democrática lo que se discute son las ideas de los ciudadanos; los compatriotas se manifiestan de formas tan indistintas que a veces las ideas de dos personas que han sido vecinos, de casa, por décadas piensen de formas irreconciliables. Por lo general los filósofos proponen ideas con el propósito de que los ciudadanos se comporten de la forma que ofrecen. Conseguir el poder es el asunto.
Mi persona fue militante de izquierda en el periodo del 2008-2018, hasta que la realidad del materialismo dialéctico no fue capaz de explicarme la naturaleza. Fiel luchador por los intereses del colectivo y del individuo. Ya no me considero de izquierda mucho menos soy de derecha ni de centro, esa forma de percibir la realidad es como una línea que tiene dos extremos y centros; a mí me gusta más asimilarla como una esfera que presenta la posibilidad de extremos infinitos según las expresiones existentes. También existen las visiones como, el triángulo de tres extremos, el cuadro de cuatro…, el circulo de infinitas según las expresiones, en fin, todas las figuras geométricas y las posibilidades de extremos son validas en política, mas una la total o perfecta donde todos son una posibilidad.
A mi juicio un ego con pretensiones de obtener el poder debe proponer una filosofía a seguir, principalmente en ella dejar claro los fundamentos lógicos de su propuesta ¿de adónde surgen sus ideas? ¿Cuál es el principio de su partida? A muchos este punto no les parece importante, no obstante, es el principal de todo, ya que los fundamentos de origen trazan la línea a seguir.
En las próximas elecciones de Colombia la división en dos extremos posiciona a dos propuestas como los mayores opcionales a ganar la presidencia, sin embargo, las propuestas son variadas. La democracia en su sabiduría a declarado que las posibilidades son tantas como candidatos y opciones de voto hay; este país está en decadencia porque el grupo perdedor quiere cambiar las reglas del juego manifestando que el voto en blanco es una aberración política, debido a que en las pasadas elecciones perdieron por que un grupo decidió ejercer su derecho democrático de votar en blanco ( obvio esto no tiene presentación en la historia, por muchas razones una de esas es: Los que perdieron no pueden echarle la culpa de su fracaso a otros). Creo que si en un país hasta la oposición es antinatural-democrática la política no puede estar bien.
Asimismo pienso que en el terreno de la política no hay opción hoy en Colombia, ninguno presenta una propuesta calificada en llevar a este país a ser el mejor del mundo. En Colombia no hay opciones, las que hay no son capaces de sacarlo de donde está; la que gana quiere mantenerlo igual, la que pierde quiere solucionar los problemas del país, pero desde una filosofía incapaz de llevarla a la cúspide; ninguna de las dos tienen un fundamento lógico, solo se basan en el criterio de un líder. Digamos que únicamente siguen al candidato. En el mundo de la política se aprecia muy bien lo de la particularidad y lo de la totalidad. En otro escrito propondré mi filosofía política.